Contratar los servicios de un agente o asesor inmobiliario a parte de tiempo le puede ofrecer rentabilidad económica a su propiedad.
La experiencia y el "buen hacer" del agente es una de las características que puede dar mayor confianza al propietario del inmueble y así poder
valorar objetivamente el precio final.
Todos sabemos que la venta o el arriendo no es misión imposible, pero una vez realizado el primer paso hay un número de trámites legales que realizar y en ocasiones para el propietario le puede resultar dificultoso.
Al contratar los servicios de un asesor inmobiliario, el propietario se asegura el respaldo profesional y que le aclaren sus dudas e indicarle las mejores alternativas para la venta o arriendo de su inmueble.
El asesoramiento inmobiliario es un abanico muy amplio, y para el éxito no sólo se trata en ser hábil en poner un precio final al inmueble.
¿Cuantos propietarios han recibido la visita de un asesor para un inmueble en arriendo y le han preguntado el precio y nada más?,... ¿hay alguno que tenga esa experiencia? le animaría si usted es propietario nos cuente su experiencia en arriendos.
Es siempre importante conocer;
¿Para que tiene ese inmueble el propietario?
¿Tiempo que quiere alquilarlo?
Conocer las características de la vivienda, entorno del barrio, perfiles de los vecinos, etc... nos ayudará en el momento de seleccionar el perfil idóneo para cada inmueble. (no es lo mismo una vivienda para universitarios, que una vivienda para una familia con un hijo en edad escolar, que una vivienda para un directivo que ocupara la vivienda de lunes a viernes,...)
Y un sin fin de preguntas más,... aquí es donde radica la experiencia y habilidad del asesor inmobiliario, en la resolución.
